Una marca personal no es más que la creación de una comunidad que comparta tu visión, ideas y estilo de vida. Estas son 3 maneras en que puedes convertir tu conocimiento en una marca personal que te posicione como una autoridad.
Postergar mi marca personal, por creerlo poco necesario para conseguir clientes, fue mi mayor error.
Una marca personal no es más que la creación de una comunidad que comparta tu visión, ideas y estilo de vida. Estas son 3 maneras en que puedes convertir tu conocimiento en una marca personal que te posicione como una autoridad.
«Nahh, no necesito crear ningún tipo de contenido en redes sociales para darme a conocer, con mis referidos es más que suficiente». Esta fue la manera de pensar que me mantuvo limitado por un buen tiempo hasta que entendí el poder de las redes sociales para transmitir un mensaje, darme a conocer y expandir mi negocio a personas que de otra forma jamás me hubieran encontrado.
Hoy en día predico el evangelio de crear contenido en cualquiera de sus formas, sin excusas. No hacerlo, reducirá en gran forma tu impacto, influencia e ingresos. Verás, aun cuando no te gusten las redes sociales o las sientas una perdida de tiempo (Que si lo son si las usas solo para consumir información), es muy probable que las personas que necesitan escuchar lo que tienes para decir, sí estén ahí.
Si no eres parte de la conversación con tu marca personal, quienes un día pudieron haber sido tus clientes, estudiantes o seguidores, terminarán comprando las ideas de otro, que no necesariamente quiera lo mejor para ellos.
Una marca personal no es más que la creación de una comunidad que comparta tu visión, ideas y estilo de vida. Estas son 3 maneras en que puedes convertir tu conocimiento en una marca personal que te posicione como una autoridad.
Escribe tus ideas.
Anotar tus ideas te permite pulirlas antes de distribuirlas al mundo. Tu trabajo es crear el hábito diario de poner tus pensamientos en papel, para luego crear contenido tomando como fundamento esos conceptos.
Responde estas preguntas para preparar tu mente antes de cada sesión de creación
¿Sobre qué quiero escribir hoy?
Si pudiera enseñarle algo a alguien hoy sobre mi tema ¿Qué quisiera decirle?
¿Por qué quiero hablar sobre este tema?
Ejemplifica tus ideas
Piensa en una analogía, historia o ejemplo claro que te permita explicar lo que sabes de una manera más simple, amena e inolvidable.
Responde a estas preguntas para simplificar tu mensaje:
¿Esto lo pudiera entender un niño de 8 años?
¿Estoy redundando en mis palabras?
Si tuviera que decir lo que quiero decir en menos de 10 palabras ¿Cuáles serían?
Extrapola tus ideas
Ponte en los zapatos de la persona a la que quieres enseñar.
Tu experiencia te ha servido por tu situación, estilo de vida y metas, pero ¿Le servirían a otro? Responde a estas preguntas para afinar tu mensaje:
¿Son mis ideas válidas para otro tipo de escenarios?
¿Son mis ideas aplicables por cualquier tipo de persona o solo por alguien específico?
Sabiendo lo que ahora sé ¿Qué consejo le daría a las personas?
Conseguir clientes es el resultado natural de crear una marca personal que venda por ti 24/7. Si no creas contenido en los canales donde tus posibles clientes se encuentran, no solo limitas tu crecimiento empresarial, sino también personal. Hablar sobre lo que sabemos nos recuerda de lo que somos capaz.
Autor: Juan Churion